Creí que no iba a ser capaz. Creí que no podría. Pero ha pasado. Ya van cuatro hornadas de cupcakes y aún no he probado ninguno. Eso sí, opiniones y críticas constructivas no me faltan. Lo agradezco.
Después de "pelearme" un buen rato con la manga pastelera he conseguido estos cupcakes de principiante: de manzana y perlitas de chocolate. ¡Dios! Si pudiera probar el chocolate. Pero no puedo. Desde el fondo de mi armario hay un biquini que no he podido volver a ponerme desde que he sido mamá y que me llama a gritos (impertinente!) Y ya van casi dos años. Lo sé, es que una es de efectos retardados y justo ahora, he caído en la cuenta de la cantidad de prendas que no había podido volver a usar. Así pues, decidida como nunca, he desterrado de mi dieta pan y dulces, convencida de que el verano que viene podré volver a caer en sus redes (con moderación, por supuesto)
Mientras, mi sufrido marido al que he "machacado" insistentemente para que se solidarizara conmigo e iniciara esta maravillosa dieta (por llamarla de aguna manera), aplaude mi decisión de adentrarme de lleno en el mundo de la repostería, algo que tenía muy olvidado hasta que no he podido tener algo de tiempo libre para mí.
Eso sí, atención a la suerte de desdichas que se suceden en mi casa: Cuando, toda ilusionada, he ido a por mi Nikon D40 (algo anticuada ahora mismo pero sigue haciendo unas fotos buenísimas), he descubierto que mi preciado tesoro no funcionaba correctamente. Eso me pasa por dejar la cámara en manos de sobrinas hostiles que pelean como locas cuando quieres recuperarla. ¡Qué monas las sobrinitas! (la mía es un cielo a pesar de todo)
Estas imágenes están tomadas con un Iphone4 al que no le puedes pedir milagros en cuestión de fotografía, pero bueno, más o menos, se pueden mirar.
Han servido como pastel de cumpleaños porque éramos poquitos y no tenía tiempo para liarme con el pastel de fondant (mi primera incursión fue hace menos de un mes y aún estoy muy verde...)
La receta está más o menos "customizada" de uno de mis blogs favoritos, el de
Alma. Creo que le he añadido algo más de manzana y he usado azúcar blanco en vez de azúcar moreno.
100 gr. azúcar
100 gr. harina
100 gr. margarina
150 gr. manzana cortada a dados muy pequeñitos
1 cucharadita de canela
1 cucharadita de levadura tipo Royal
2 huevos
Primero he mezclado y batido con cuidado la mantequilla (a temperatura ambiente, no vale ponerla al microondas) con el azúcar. Después he añadido poco a poco la harina, la canela y la levadura (previamente tamizadas). Sin dejar de mezclar, he añadido los huevos y he batido con tranquilidad hasta obtener una masa homogénea. Como último paso, los daditos de manzana. Y la masa ya estaba lista para colocarla con cuidado en las cápsulas de vichy verdes. Listo!!!!
Horno a 170-180
°C y unos 15-20 minutos dependiendo del horno (en cuanto pinchemos y nos salga seco, ya están listos)
Para decorar: Buttercream con una chispa de colorante verde en gel Wilton (quería que quedase muy suave)
125 gr. mantequilla (a temperatura ambiente)
225 gr. azúcar glass tamizado
1 cucharadita de aroma de vainilla en polvo
3 cucharaditas de leche
¿Cómo? Trabajar la mantequilla e ir añadiendo el azúcar cucharada a cucharada, añadir el aroma y cuando ya se desmigue la mantequilla, añadir la leche.
Los he decorado con sprinkles de corazones (ahora no recuerdo la marca) y los números los he comprado ya hechos (¡genial!) en un set que he encontrado del Dr. Oetker.
Yo creo que estaban buenísimos porque han repetido... O porque no se atrevían a decirme que no, eso ya no lo sabremos porque no lo voy a preguntar nunca :-)
PD. Por cierto, mi amasadora es una Philips que tiene un montón de años... todo se andará, no desespero.