Nunca os lo había confesado pero me chifla el queso, sea del tipo que sea: tierno, gruyère, emmental, roquefort, crottin, gorgonzola, provolone, brie, camembert, reblochón, cabrales, chaumes, cheddar, gouda, idiazábal, manchego, fresco... Todos me ponen de buen humor.
Por decir que, muchas veces, cuando tengo un pequeño bajón anímico dudo entre el chocolate y el queso. Los dos me proporcionan un placer parecido al de coger el portante y salir de compras (que, dicho sea de paso, también me provoca un buen rollo instantáneo. Sobretodo por la cara de pavor de mi marido cuando vuelvo con el "cargamento"...)
Y mi peque se parece a mí... Supongo que, fruto de los nueve meses que pasó en la barriguita (o barrigota) de una madre obsesionada por el provolone, ahora sólo abre la boca para pedir bocata fufatge (en su idioma bocadillo de queso)
Ingredientes (para 12 unidades de quiche-cupcakes)
Un paquete de masa quebrada fresca (lo podéis hacer casera, os dejo la receta de Su de Webos fritos, os saldrá genial)
100 gr. queso emmental rallado
100 gr. jamón york cortado a daditos
3 huevos medianos
200 ml. nata para cocinar (aprox. 18 % materia grasa)
Preparación:
Precalentar el horno a 180º y preparar el molde para cupcakes con las cápsulas de papel.
Estirar la masa quebrada con un rodillo para que quede totalmente lisa. Con un cortador metálico hacer redondas de aproximadamente 10 cm de diámetro y adaptarlas en cada una de las cápsulas presionando para que se sostengan en el papel (sin estirar la masa, sólo haciendo una ligera presión para adaptarla al molde)
Depositar unas legumbres secas o bolitas de las que se usan para hornear encima de cada uno de los moldes y hornear 8 minutos.
Mientras la masa se cuece, batir los huevos lentamente e incorporar la nata, el queso emmental y los dados de jamón. Mezclar bien y reservar.
Sacar la masa de los quiche-cupcakes del horno y retirar las legumbres o bolitas. Añadir la mezcla líquida a cada una de las cápsulas (podemos rellenarlas un poquito más de los 2/3 usuales para hacer un cupcake dulce)
Hornear aproximadamente 15 minutos hasta que la superficie de la quiche se haya dorado ligeramente. Dejar enfriar y aplicar un icing de queso crema con unos dados de jamón (aún más pequeños que los del relleno de la quiche)
Pd. Un apunte: Mi marido me ordena cariñosamente que os diga que lo que más le aterroriza del proceso post-compra antes descrito, es el momento del pase de modelito y el Me queda bien? Por qué será???????
Tienen una pinta riquísima, además a mi también me vuelve loca el queso!!! Gracias por la receta!!
ResponderEliminarAyyyy, Dios miooooo!!!!!!!!! No te ha sobrado alguno para mandar por mail???? Qué pinta, qué buenos tienen que estar... tengo que probar a hacerlos este finde!!!!
ResponderEliminarEnhorabuena!!!
Besos
Esther
Ay por Dios!! cómo me puede entrar hambre de quiche a las 10 de la mañana??? son preciosos, originales y seguro que riquísimos. Aunque tengo una duda...de qué es exactamente el icing de queso??
ResponderEliminarSólo crema de queso philadelphia bien frio... Un beso!
EliminarEstos caen segurísimo. A mi marido le encanta la quiche de baicon, así que haremos cupcakes-quiche la próxima vez. Gracias por compartir tus súper recetas. Besos
ResponderEliminarEstaba leyendo tu entrada y me estaba identificando perfectamente... y con las variedades que existen para hacer quiches, tu idea abre las puertas a las miles de variedades de cupcakes salados... esta navidad hice unas mini-cupcakes de gorgonzola con pera que estaban de muerte... voy a buscarlas y te las paso! Un saludo y gracias por compartir!!!!
ResponderEliminarLos cupcakes salados son mi receta pendiente, me apunto la tuya que te han quedado fenomenales
ResponderEliminarNo saps quant m'encanta la quiche!!!! Sobretot la de bacon-formatge!! I sóc una gran apassionada dels formatges tia...m'agraden TOTS! Així que aquests cupcakes cauran segur, ja he fet mini quiches pero en forma de cupcake mai! :) Genial idea!
ResponderEliminarPetons guapa
Otra fanática del queso y esas quiches están gritándome cómeme. Deliciosas y preciosas. Un beso.
ResponderEliminarque ricas!!, a mi también me encanta el queso, soy fan de cualquier tipo de queso.
ResponderEliminarun besito
Ay, que ricos deben estar. ¿Para comer fríos?
ResponderEliminarTengo una receta de quiche de cebolla caramelizada y queso de cabra pendiente. También nos chifla el queso en casa, y va la peque y nos sale alérgica a la leche, ¡¡manda quesos!!
Patricia, los primeros los comimos poco después de salir del horno... Los otros los comimos fríos. A mí me gustan más un poco calentitos pero creo que se pueden tomar de las dos maneras... Aunque la masa de la quiche a la nevera se reseca y se reblandece, así que hay que comerlos pronto para no tener q recurrir a la conservación de la nevera...
EliminarUy Patricia, creo que si a mí me sale de repente una intolerancia a la leche, me pego un tiro (metafóricamente hablando, claro)
Un besazo
Ahora tengo esa quiche en el horno, la cebolla caramelizada está buenísima, no la había probado nunca. Será la cena de esta noche para los papis.
EliminarBueno, te acostumbras a todo, primero te pasa como tú has dicho, cierto. Imagina la fiesta cuando volvimos a sacar el queso a la mesa sin paranoias, jaja.
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ResponderEliminarQué bonita presentación, Ivana! yo que me harto de hacer quiches de jamón porque me encantan nunca se me había ocurrido hacerlo en forma de cup cake con lo mono que queda! Para la pròxima no se me olvida! Muchas gracias!!!!
ResponderEliminarohh, qué rico! unas mini quiche en forma cupcake, qué buena idea! te han quedado preciosas!
ResponderEliminarbesos
Mmmmmmm quiche de jamón y queso... me encanta!!! Hice una hace un par de años y me encantó, y esta versión mini es genial!! Yo también soy una loca de los quesos, y aunque parezca mentira prefiero un trocito de queso antes que uno de chocolate!!!
ResponderEliminarUn besito guapa!! :)
Pero que ricos y originales!!! Un beso
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